Asiste a clases con puntualidad. El cuerpo y equipo limpios, las uñas de las manos y de los pies cortas. Despójate de medallas, reloj, pulseras, anillos, aros, etc.
Mantente siempre en postura equilibrada y aprende a respirar en sintonía con los movimientos.
No intentes nunca un movimiento sin estar bien equilibrado.
Abandona toda rigidez y crispación muscular “producto de tu miedo,” y entrena relajado.
No hagas alardes ya sea para resistir al otro, tirarte, pues te falta experiencia y control.
Confía en tu profesor o instructores, escúchales y haz lo que te dicen porque es la manera más segura de aprender.
No te canses de repetir una y otra vez cada técnica y hazlo en silencio, olvídate de todo lo que no sea “aquí y ahora.”
Cuida a tu compañero de prácticas para no lesionarlo, mantén la vigilancia a tu alrededor para que nadie caiga sobre ti.
Se constante en la asistencia a clases.
Que tu comportamiento sea correcto y amable siempre con todos.